La lesión de la inserción del tendón de Aquiles es menos frecuente que en el cuerpo del tendón, siendo un 25% del total de las lesiones del tendón de Aquiles. Suele afectar a pacientes de mediana edad que han practicado previamente mucho deporte, siendo frecuente en personas con sobrepeso.
Su sintomatología de dolor e inflamación en la parte posterior del talón, que origina una gran impotencia funcional, puede confundirse con otras patologías que pueden originar síntomas similares en esa zona: Bursitis retrocalcánea y/o retroaquílea, exostosis intratendinosa posterior del calcáneo y Síndrome de Haglund.
El dolor suele aumentar de noche, y cuando se comienza a caminar tras estar sentado. El dolor se despierta también a la palpación, pudiendo aparecer enrojecimiento. Dificulta la marcha y la carrera, subir escaleras. El dolor en los laterales del tendón pueden reflejar una bursitis reatrocalcánea que puede estar asociado a la lesión tendinosa.
Los síntomas anteriores orientan el diagnóstico, pero el Dr. Vicente de la Varga, en su clínica CAMDE en Málaga, realizará una ecografía en la consulta que confirmará la sospecha diagnóstica evaluando el grado de lesión del tendón, la existencia de calcificaciones intratendinosas o una bursitis asociada. Una radiografía lateral del pie nos informará sobre la extensión de las calcificaciones y la resonancia magnética nos aportará una visión general del área, útil sobre todo si planteamos una cirugía.