Traumatólogo en Málaga » Traumatología avanzada » Tendinitis » Flexor primer dedo pie
Probablemente muy poca gente sea conocedora de la patología que vamos a tratar a continuación y es por ello por lo que vamos a intentar explicarla de principio a fin. La tendinitis del flexor largo del dedo gordo, más conocida como tendinitis de la bailarina, afecta al extensor del primer dedo del pie.
El músculo flexor largo del dedo gordo (Flexor Hallucis Longus), se trata de un músculo largo y profundo que comienza en la parte posterior del peroné y acaba, en forma de tendón muy fino, por debajo del dedo gordo del pie. Su función obviando la de flexionar el dedo gordo, es la de evitar o sujetar la extensión que lo compone, es decir, colabora con la fascia y el resto de músculos de la planta del pie con el fin de mantener el arco plantar evitando que se hunda o los dedos se hiperextiendan cuando nuestro talón no toca el suelo.
Es fácil confundir esta lesión con otras como las que afectan de forma directa a los extensores de los dedos del pie, siendo esta última bastante más común.
Los pacientes con esta afección suelen experimentar dolor en la región del tobillo interno y que desciende hasta el dedo gordo del pie. Podemos encontrarnos en casos más severos en los que además de experimentar dolor durante una actividad física como saltar, ponernos de puntillas o correr, sentimos dolor en el reposo sin necesidad de haber practicado ejercicio alguno con anterioridad.
Los síntomas que sentiremos son los siguientes:
Aunque de forma coloquial se le denomina tendinitis de bailarina, esta lesión también es sufrida por corredores.
Esta tendinitis puede ocurrir traumáticamente debido a una fuerza considerable que somete al tendón más allá de lo que puede soportar, o más comúnmente, debido al desgaste gradual asociado con el uso excesivo, lo que termina convirtiéndose en una inflamación dolorosa y puede conllevar una rotura si el tratamiento adecuado.
Los bailarines de ballet pasan un tiempo significativo levantándose sobre los dedos de los pies, siendo el extensor del dedo gordo uno de los que más trabajo realiza sobre todo si la técnica es errónea, o se cometen fallos que le hagan realizar un sobreesfuerzo en un momento dado.
Los factores que predisponen a los pacientes a desarrollar una tendinitis del flexor largo del dedo gordo, pueden incluir:
Como se dijo al comienzo, esta patología no es algo común, ya que normalmente la lesión no se centra en uno de los tendones o extensores aunque este sea el que más puede ser a trabajar, sino que se vuelve algo más generalizado que afecta al conjunto de extensores y se provoca con movimientos como podría ser el pisar el acelerador del coche.
Para el diagnóstico de la tendinitis del flexor largo del dedo gordo, se hará uso de dos métodos, palpación o examinación manual, y una serie de resonancias magnéticas y ecografías.
El Dr. Vicente de la varga, traumatólogo especialista, realizará el diagnóstico y evaluará la movilidad del dedo gordo del pie del paciente, sometiéndolo a una resistencia que debe superar flexionando dicho dedo, quedando casi confirmada la tendinitis en caso de que sienta dolor alguno.
Esta patología puede dividirse en una serie de grados de gravedad y por ello el Dr. Vicente de la varga determinará dicho grado con una serie de ejercicios para evaluar el nivel de dolor y posteriormente, una resonancia magnética y/o ecografía, para comprobar si la tendinitis ha pasado a ser una rotura o hay otros extensores dañados, lo cual conllevaría un tratamiento diferente.
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Como algo esencial para el tratamiento, es necesario cesar en gran medida toda actividad física que cause dolor y no esté supervisada, ya que hasta no estar libre de síntoma, el dolor y la tendinitis son propensos a empeorar si no se tratan adecuadamente.
Una vez que sus pacientes puedan realizar actividades sin dolor, les indicará un retorno gradual las actividades siempre que no haya un aumento en los síntomas, ya que esto podría provocar una afección crónica y ralentizaría significativamente la curación.
Lo primero que hará será reducir significativamente la inflamación en la fase inicial de la afección con medicamentos antiinflamatorios y masajes, siguiendo una rutina de ejercicios supervisados.
En caso de que la tendinopatía se encuentre en una fase avanzada, será necesario recurrir a ciertas técnicas como lo puede ser la cirugía FAST, el plasma rico en plaquetas y las células madre ecoguiadas. Estas técnicas, suponen un avance que el Dr. Vicente de la varga, traumatólogo especializado en todas las técnicas citadas, ofrece a sus pacientes con el fin de suplir una falta de seguridad que sienten al afrontar una cirugía convencional.
Una vez pueda considerarse sanada la tendinitis, el paciente bajo las instrucciones de algún preparador físico, deberá intentar realizar una serie de ejercicios con el fin de fortalecer aquellos músculos donde sufre algún tipo de debilidad muscular, evitando así futuras lesiones que podrían agravarse al tener ya un historial de patologías por el estilo.
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