Dolor de rodilla en corredores: causas, diagnóstico y tratamiento desde la traumatología deportiva
El dolor de rodilla en corredores es uno de los motivos de consulta más frecuentes en traumatología deportiva. Afecta tanto a runners aficionados como a deportistas experimentados y, aunque muchas veces se normaliza como parte del entrenamiento, lo cierto es que suele ser la manifestación de una sobrecarga o lesión que requiere valoración médica.
Desde el punto de vista del traumatólogo deportivo, identificar el origen del dolor es clave para evitar la cronificación, mejorar el rendimiento y permitir una vuelta segura a la carrera.
¿Por qué aparece el dolor de rodilla al correr?
La rodilla es una articulación compleja que actúa como punto de transmisión de fuerzas entre la cadera y el tobillo. Durante la carrera, puede soportar entre 3 y 5 veces el peso corporal en cada zancada. Cuando estas cargas se repiten sin una adaptación adecuada, aparece el dolor.
Las causas más frecuentes del dolor de rodilla en corredores incluyen:
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Aumento brusco del volumen o la intensidad del entrenamiento
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Falta de descanso y recuperación
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Alteraciones biomecánicas de la carrera
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Déficit de fuerza o control muscular
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Uso de calzado inadecuado
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Superficies de entrenamiento exigentes
En muchos casos, el problema no es un único factor, sino la suma de varios.
Lesiones más frecuentes asociadas al dolor de rodilla en runners
Síndrome femoropatelar
Es una de las causas más comunes de dolor anterior de rodilla en corredores. Se produce por un desequilibrio en el deslizamiento de la rótula sobre el fémur, generando molestias al correr, bajar escaleras o tras estar sentado mucho tiempo.
Tendinopatía rotuliana
Afecta al tendón rotuliano y es habitual en corredores que entrenan con cuestas, cambios de ritmo o cargas elevadas. El dolor suele localizarse justo debajo de la rótula y empeora con la actividad.
Síndrome de la cintilla iliotibial
Provoca dolor en la cara externa de la rodilla, especialmente durante carreras largas. Es típico que el dolor aparezca progresivamente y obligue a detener el entrenamiento.
Lesiones meniscales
En corredores, suelen ser de carácter degenerativo o por microtraumatismos repetidos. Pueden provocar dolor, inflamación o sensación de bloqueo articular.
Importancia del diagnóstico médico
Ante un dolor de rodilla persistente, la valoración por un traumatólogo deportivo es fundamental. Un diagnóstico precoz permite actuar antes de que la lesión se cronifique.
La evaluación médica incluye:
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Historia clínica detallada
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Exploración física específica de la rodilla
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Valoración funcional y biomecánica
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Pruebas de imagen como ecografía o resonancia magnética cuando están indicadas
No todos los dolores de rodilla son iguales, y tratarlos sin un diagnóstico claro puede empeorar el problema.
Tratamiento del dolor de rodilla en corredores
El tratamiento debe ser individualizado y adaptado a la causa del dolor, al nivel deportivo y a los objetivos del corredor.
Desde la traumatología deportiva, el abordaje incluye:
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Ajuste temporal de la carga de entrenamiento
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Tratamiento médico del dolor y la inflamación
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Infiltraciones en casos seleccionados
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Trabajo coordinado con fisioterapia y readaptación deportiva
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Corrección de factores predisponentes
El objetivo no es solo eliminar el dolor, sino permitir una vuelta progresiva y segura a la carrera.
¿Cuándo es necesaria la cirugía?
La cirugía es poco frecuente en corredores, pero puede estar indicada cuando existe una lesión estructural relevante, como determinadas lesiones meniscales o rotulianas que no responden al tratamiento conservador.
La decisión quirúrgica siempre debe tomarse tras una valoración especializada.
Prevención del dolor de rodilla al correr
La prevención es clave en el corredor. Algunas recomendaciones fundamentales son:
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Progresar de forma gradual en el entrenamiento
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Respetar los tiempos de descanso
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Realizar controles médicos deportivos periódicos
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No ignorar las primeras molestias
Conclusión
El dolor de rodilla en corredores no debe normalizarse. Un abordaje médico adecuado permite identificar la causa, tratar la lesión y prevenir recaídas, garantizando una práctica deportiva segura y sostenible.



