El hueso en las cercanías de la articulaciones tiene una forma trabecular similar a la de un panal de abejas, con pilares de hueso duro ricos en calcio rodeados de espacios huecos rellenos de células precursoras de la sangre y grasa, denominado hueso esponjoso.
El edema óseo es la inflamación del interior del hueso, del hueso esponjoso que se rellena de células y líquido inflamatorio, aumentándose la presión y originando dolor. También tiene un componente de microfracturas y aplastamiento los pilares óseos aumentando la inflamación.
El único síntoma es el dolor, que se diferencia del dolor que aparece en cualquier otra lesión articular o en la artrosis en que es más persistente en el tiempo, responde peor a los antiinflamatorios y aumenta al cargar el peso sobre la zona. Hay que sospecharlo cuando una lesión no se resuelve en un plazo razonable, continuando el dolor y la dificultad para caminar. El diagnóstico sólo es posible mediante una Resonancia Magnética que nos permite ver es aspecto interno del hueso. Puede aparecer en cualquier articulación, pero es más frecuente en rodilla (cóndilos femorales y rótula), tobillo (astrágalo) y en pubis-cadera.
Lo que más nos desconcierta del edema óseo, sobre todo en el mundo del deporte, es que no es previsible la duración del edema óseo. Puede durar desde pocas semanas a varios meses, durando menos en los casos agudos, por un traumatismo, pudiéndose hacer permanentes en los casos de artrosis avanzadas.
El edema óseo no responde a los tratamientos habituales para las lesiones que lo originan (traumatismos, artrosis) como son los antiinflamatorios o la fisioterapia. Se puede aliviar el dolor con éstos tratamientos, pero el alivio es temporal y no altera el curso natural del edema óseo.
En CAMDE hemos desarrollado un protocolo de tratamiento del Edema óseo que permite acortar la duración del proceso. Se basa en tres fases que vamos aplicando en función a la duración e intensidad de los síntomas:
El tratamiento inicial se basa en descargar la articulación caminando con muletas, sin apoyar, aliviando el dolor con analgésicos y con tratamientos fisioterápicos como la radiofrecuencia.
Tratamiento intravenoso con un bifosfonato (ácido zoledrónico) y vitamina D para aumentar la densidad del hueso.
Realizamos un Subcondroplastia con células madre mesenquimales para regenerar la médula ósea inflamado de forma crónica
Este innovador tratamiento, del que el Dr. De la Varga es pionero, se basa en inyectar dentro del hueso, en la zona de edema óseo, una solución de células madre mesenquimales que regeneran el hueso esponjoso, resolviendo la inflamación y desapareciendo el dolor.
Tras obtenerse las células madre mesenquimales de la grasa abdominal y de la médula ósea se introducen en la zona de hueso con edema óseo mediante un trocar, una especie de tubito de 3 mm de diámetro que tiene múltiples perforaciones en la punta. Tras localizar el edema en la resonancia magnética introducimos el trocar con ayuda de una fluoroscopia (RX dinámica) que nos permite situarlo con total exactitud en el centro del edema.
Este procedimiento lo realizamos en el quirófano que tenemos es CAMDE y es desarrollado con anestesia local y sedación suave aplicada por un médico anestesista.
El procedimiento dura 30 minutos, de forma ambulatoria y el paciente dado de alta una hora después. La mejoría del edema óseo se produce en las semanas siguientes al procedimiento, mejorando el dolor a los pocos días del tratamiento.