¿Qué es la prótesis de hombro?
Una prótesis de hombro es una articulación artificial que sustituye la articulación del hombro lesionado que no puede ser tratado ni curado con otros sistemas más sencillos. También recibe el nombre de artroplastia de hombro. Es un procedimiento mediante el cual se sustituye la articulación glenohumeral (aquella ubicada entre la cabeza del húmero y la escápula u omoplato) por un implante protésico.
¿Por qué se realiza?
La principal causa que puede hacer necesaria una prótesis de hombro son los problemas degenerativos de la articulación. Así, la artroplastia de hombro está indicada en casos de artrosis evolucionada o de artritis severa de hombro (artritis reumatoide), para controlar el dolor y recuperar la funcionalidad perdida, y también si ha habido alguna fractura de hombro proximal o rotura de tendones, en que la reconstrucción quirúrgica no sea posible.
¿En qué consiste?
La prótesis de hombro se coloca en el paciente mediante cirugía, con anestesia general. Es una intervención que suele durar unas dos horas y, posteriormente, el paciente quedará ingresado en el hospital unos 5 días, en la mayoría de los casos.
Existen dos tipos de prótesis, cuya cirugía dependerá del daño de la articulación y las estructuras tendinosas adyacentes que soportan la articulación. Pueden ser: prótesis anatómicas o prótesis invertidas. En la prótesis anatómica se reproduce la anatomía natural del hombro y, para que funcione, requiere que los tendones del hombro estén conservados. En las prótesis invertidas se excava para que aloje y se articule sobre el componente escapular, al revés de la posición natural de la articulación.
También hay distintos modelos de prótesis que se emplean según la patología o edad del paciente: prótesis humeral de superficie, prótesis total anatómica de hombro, hemiartroplastia de hombro o prótesis invertida de hombro.
Los resultados suelen ser muy buenos. Siempre es muy importante la experiencia del cirujano y que el paciente colabore con el postoperatorio y el programa de rehabilitación. Así, el paciente recuperará una función muy buena tras varias semanas con el brazo inmovilizado.
Preparación para la Prótesis de hombro
El especialista en Traumatología indicará en cada caso cuál es la preparación que deberá seguir el paciente. Así, dependerá del tipo de lesión que tenga y de la ubicación de esta, así como de su edad y de cómo hayan funcionado otras posibles terapias aplicadas con anterioridad.
Cuidados tras la intervención
Poco después de la cirugía el especialista en Traumatología enseñará al paciente ejercicios suaves de movilización pasiva pero la rehabilitación propiamente dicha empezará 4-6 semanas después de la operación.
El dolor postoperatorio no es muy intenso porque la cirugía se realiza con anestesia general y con anestesia del plexo braquial. Con esta última anestesia se duerme el brazo con una pequeña inyección en la raíz del brazo, bloqueando el sistema nervioso periférico. Cuando el paciente despierta de la anestesia no notará dolor porque el brazo sigue anestesiado y el hombro se va despertando lentamente. A partir de entonces será necesario que tome algunos analgésicos, para que el postoperatorio sea más cómodo.
Alternativas a este tratamiento
Las alternativas a la prótesis de hombro son todos aquellos tratamientos que se puedan aplicar con el objetivo de preservar sana la articulación y lograr su correcto funcionamiento. Antes de aplicar una prótesis de hombro el especialista probará otras terapias y tratamientos conservadores.