Lesiones en el baloncesto y curiosidades
El baloncesto se encuentra entre los diez deportes más practicados del mundo. El deporte que requiere de pelota y canasta es un deporte que permite jugar con más personas y durante todo el año, lo que hace que sea uno de los deportes más populares con más de 400 millones de practicantes en todo el mundo. El baloncesto es un deporte que combina las extremidades inferiores, para correr y desplazarse dentro del campo, con las extremidades superiores, podemos botar la pelota, pasarla, tirar a canasta etc. Es por todos estos movimientos que podemos encontrar una gran variedad de lesiones en las personas que practican el baloncesto. En este artículo conseguimos presentar las lesiones del baloncesto más frecuentes y describir cómo suceden.
5 Curiosidades que no sabes del baloncesto
Antes de descubrir qué lesiones del baloncesto son las más frecuentes vamos a conocer las peculiaridades más llamativas del baloncesto.
- El primer partido con público se juega en 1892. El primer partido jugado sin público se dice que se jugo en 1891 y sólo se anotó un punto. Jugaron los 18 alumnos de Naismith y el punto lo anotó William R. Chase.
- Wilt chamberlain mantiene el récord de puntos anotados en un partido. El 2 de marzo de 1962, en una victoria sobre los Knicks por 169-147 en el Hersheypark Arena en Hershey, Pennsylvania, Wilt Chamberlain consiguió anotar 100 puntos.
- La función inicial del tablero era proteger al público. En los comienzos el tablero no existía por lo que el rebote no formaba parte del juego. En 1893, los primeros tableros fueron creados para mantener a algunos aficionados fuera del juego. Cuando se incorpora el tablero, el rebote pasa a ser parte del juego. Estos eran de alambre, al igual que las canastas.
- Es en 1936 cuando el baloncesto es reconocido como deporte olímpico. En 1904 aparece por primera vez el baloncesto en los juegos olímpicos como un deporte de exhibición. Es en 1936, en los juegos olímpicos de Berlín, cuando se reconoce el baloncesto dentro de la competencia de los juegos olímpicos.
- El balón usado en los inicios era de fútbol. Después, darían forma a un balón más fuerte y llamativo, propio del baloncesto.
Las lesiones en el baloncesto más frecuentes
Los tipos de lesiones en los jugadores o practicantes del baloncesto pueden ser muy diversos, ya que el baloncesto requiere del uso de piernas y brazos, además de movimientos muy rápidos como saltos, cortes, carreras de velocidad, etc. Algunas de las afecciones más comunes son:
- Esguince de tobillo.
- Lesiones de los dedos de las manos.
- Lesiones de rodilla.
- Contusiones en el muslo.
- Cortes faciales.
- Fracturas por estrés.
¿Cómo se producen las lesiones en el baloncesto?
A continuación, describimos las lesiones de baloncesto más frecuentes según las zonas y articulaciones afectadas.
Tobillo
- Esguince del ligamento lateral externo (LLE): un esguince es cuando se produce una distensión o rotura en el ligamento a consecuencia de un movimiento brusco. Un esguince se clasifica en tres grados, siendo el grado 1 una pequeña distensión y el grado tres una rotura completa. En baloncesto estas lesiones de baloncesto suelen ser al caer mal de un salto, al pisar a otro jugador o en algunos casos, cuando el jugador hace un cambio de dirección brusco y tiene inestabilidad en el tobillo debido a otros esguinces mal curados.
- Edema óseo: se conoce a la acumulación de líquido dentro del huso debido a la fractura de las trabéculas óseas. Es una lesión difícil de detectar por radiografías, ya que suele no apreciarse. Es causa de un fuerte impacto o impactos repetidos, como caer siempre con la misma pierna al saltar.
- Tendinitis aquilea: es la inflamación del tendón de Aquiles que se puede cronificar causando un engrosamiento del tendón. En ocasiones es una lesión que puede ir acompañada de una inflamación de la bursa, siendo el periodo de recuperación mayor si es debido a un traumatismo por sobrecarga o por el tipo de calzado utilizado. Una de las lesiones en baloncesto mas graves causadas en el tendón de Aquiles es cuando existe una rotura de este, se suele producir en un gesto de arrancada fuerte ocasionando impotencia funcional y el tratamiento inicial es quirúrgico.
Rodilla
- Rotura del ligamento cruzado anterior (LCA): puede producirse por un golpe directo en la rodilla, forzándola en hipertensión o rotación, o también por “autoagresión” sin haber contacto. El ligamento estabiliza la rodilla, evitando que la tibia se desplace hacia delante con respecto al fémur.
- Rotura del menisco: el menisco es un fibrocartílago y se encarga de amortiguar y proteger las estructuras óseas de la rodilla durante el movimiento. Las lesiones del baloncesto que se producen en esta zona se deben a la torsión de la pierna con la rodilla en flexión.
- Tendinopatía rotuliana: es una lesión muy parecida a la que ocurre en el tendón de Aquiles, solo que se origina en el tendón rotuliano cuando existe una tracción y sobrecarga de los cuádriceps.
Hombro
- Luxación: las lesiones de baloncesto en el hombro son muy comunes, ya que el gesto deportivo más común es levantar los brazos por encima de los hombros. En una luxación de hombro, la cabeza del humero se desplaza hacia delante o hacia atrás, saliéndose de la articulación y manteniendo en tensión el resto de tejidos que lo forman. Con más frecuencia, se produce al caer al suelo apoyando las manos.
Muñeca/Mano
- Fractura/ fisura: ocurre al producirse una rotura del hueso. Las lesiones de baloncesto más frecuentes son la de muñeca (cubito y/o radio) a apoyarse sobre la mano al caer, y las fracturas de dedos producidas por traumatismo.
- Capsulitis: ocurre al recibir un impacto del balón sobre el dedo cuando está estirado, o al sufrir un enganche de este con uno mismo o con otro jugador. Los jugadores intentar entrenar usando vendajes para evitar las molestias que ocasiona.
Consejos para prevenir las lesiones en el baloncesto
- Realizar revisiones y hacerse un examen físico de pretemporada.
- Seguir las recomendaciones del médico.
- Mantenerse hidratado.
- Prestar atención al calor y la humedad excesiva.
- Mantener una buena forma física nos ayudará a prevenir ciertas lesiones.
- Es recomendable, tras un período de inactividad, incorporarnos al deporte gradualmente.
- El entrenamiento excesivo o el agotamiento nos hace vulnerables a las lesiones. Recuerda que más no siempre es mejor.
- No continúes con el ejercicio si sientes dolor o malestar.
- El calentamiento es fundamental para prevenir lesiones.
- No adelantes tu vuelta al juego después de una lesión sin el consentimiento del especialista en traumatología deportiva.