Según las estadísticas, el 80% de todos nosotros tendremos dolor lumbar en algún momento de nuestra vida. Se estima que, en un momento determinado, 1 de cada 6 personas presenta dolor en las lumbares de como mínimo 3 meses de duración, por lo que puede describirse como crónico. Quizás no te parezca raro, pues en la vida diaria son muchos los factores que afectan a la espalda. Algunos factores como engordar o el calzado que se utiliza son los culpables de nuestro dolor. El origen de nuestro dolor puede estar causado por muchas causas diferentes, por lo que es necesario detectar los síntomas y consultar con nuestro especialista si es dolor dura más de 3 meses. Si te interesa conocer la información más relevante al dolor lumbar no dejes de leer el articulo de traumatólogo especialista en dolor lumbar, Málaga.
Tipos de dolor lumbar
Como sabemos, el dolor de espalda es muy frecuente, pero en muchos casos no está claro qué es exactamente lo que lo provoca. Podemos diferenciar los dos tipos más frecuentes de dolor lumbar según la causa:
- Dolor de espalda mecánico
- Dolor de espalda inflamatorio.
Existen otras causas menos frecuentes que también pueden estar asociadas a un dolor de espalda como son:
- Infecciones;
- enfermedades renales o digestivas;
- polimialgia reumática;
- tumores (excepcionalmente).
Te recomendamos consultar con tu médico para que pueda ayudarte con el diagnóstico. Para la mayoría de los casos de dolor de espalda, el dolor de espalda es mecánico. Sin embargo, en una de cada 20 personas con dolor lumbar crónico, esta relacionado con cuestiones inflamatorias. En los dos casos, el dolor impide realizar las actividades cotidianas, descansar, trabajar o tener una vida social normal.
Ambas formas de dolor son muy similares, por lo que resulta difícil diferenciarlos sin ayuda. Por eso es importante consultar a tu especialista, para transmitirle el tipo de dolor.
Causas dolor lumbar
Un dato curioso de las causas principales de la lumbalgia suele ocurrir con más frecuencia en personas más jóvenes que en las personas mayores:
- Entre los adultos de 30 a 60 años existen una mayor propensión a experimentar molestias lumbares causados por una hernia discal lumbar, la discartrosis, o debido a una distensión de un músculo de la espalda o de otra parte blanda.
- Los adultos mayores de 60 años experimentan en mayor medida dolor en la espalda provocado por la degeneración de las articulaciones (artrosis, estenosis vertebral) o por una fractura.
Entre las menos frecuentes nos encontramos las traumáticas (fracturas vertebrales, espondilolisis), metabólicas (fracturas vertebrales por osteoporosis), tumorales, infecciosas y la aceleración del proceso evolutivo de la degeneración discal tras una intervención quirúrgica por hernia discal.
Entre la causa más común del dolor lumbar crónico destacamos la degeneración de los discos intervertebrales y las articulaciones posteriores. Esta afección forma parte del proceso normal de involución que se inicia en la columna vertebral a partir de los 20 años de edad, como ocurre en otras partes del organismo, asociado a una musculatura abdominal y lumbar pobre, sobrepeso y/o permanecer de pie durante mucho tiempo.
Síntomas del dolor lumbar
En general, las personas con dolor lumbar sienten un dolor persistente en la zona lumbar baja, identificada como la parte posterior de la cintura, que se desencadena al permanecer de pie y mejora en la cama. El dolor lumbar no es continuo, suele presentarse como “a trozos”, en la zona lumbar baja, en glúteo y muslo.
Las zonas más características con dolor lumbar son:
- la zona inguinal,
- los genitales,
- la cara posterior del glúteo,
- la cara posterior y lateral del muslo,
- la pantorrilla,
- cara lateral de la pierna,
- talón.
Dolor lumbar grave
Para la mayoría de los casos, la lumbalgia no es un problema grave. En el caso de sentir dolor lumbar por un traumatismo grave se recomienda consultar con un médico urgentemente si además la persona experimenta alguno de los siguientes síntomas:
- Fiebre y escalofríos
- Pérdida de peso reciente debido a un traumatismo
- Debilidad significativa de las piernas
- Incontinencia intestinal o vesical repentina
- Dolores abdominales fuertes y continuos
En aquellos casos en los que se requiera de un tratamiento inmediato, el especialista evaluara los síntomas para conocer las causas.
Tratamiento del dolor de espalda
El tratamiento del dolor lumbar tiene, para la mayoría de los casos, un pronóstico favorable. Para el diagnostico del dolor en la región lumbar no es necesario un estudio por imágenes, excepto en las siguientes circunstancias:
- Se realizarán estudios por imágenes en aquellos pacientes cuyo dolor lumbar es muy intenso, produce déficit neurológico o existe una causa subyacente según la historia clínica y el examen físico (cáncer, síndrome de cola de caballo, infección vertebral).
- Los pacientes con dolor en la espalda persistente y signos de radiculopatía o de estenosis del canal vertebral se estudiarán con resonancia magnética nuclear (RMN) y como segunda opción con tomografía computadora (TC).
En general, los pacientes con dolor en las lumbares siguen un tratamiento con acetaminofeno y antiinflamatorios no esteroides (AINE). El acetaminofeno es ligeramente más débil que los AINE, por lo que es más seguro y económico. Antes de recibir el tratamiento de AINE para el dolor de espalda, el médico evaluará los riesgos cardiovasculares y gastrointestinales asociados.
Los relajantes musculares no suelen recomendarse, ya que producen efectos colaterales sobre el sistema nervioso central como es la sedación.
En los grupos de pacientes que no se obtiene la mejoría esperada con el tratamiento farmacológico, existen otras opciones como la manipulación de la columna vertebral para el dolor lumbar crónico o subagudo, rehabilitación interdisciplinaria intensiva, ejercicio, acupuntura, masajes, yoga, tratamiento de comportamiento cognitivo y relajación progresiva, entre otras.
